facebook comscore
La aceptación radical

La aceptación radical

Columnas miércoles 08 de mayo de 2024 - 23:00

La aceptación radical es un término que últimamente he encontrado dentro de muchas narrativas. Aceptación de lo que estás viviendo, sintiendo y hasta comiendo.

Aceptación radical comienza con quitar juicios sobre lo que está bien o no sentir. Es solo darnos cuenta de qué estamos sintiendo, en qué parte de nuestro cuerpo lo estamos percibiendo, los pensamientos que nos están llegando y verlos como nubes que pasan sin identificarnos con ellos.

Es darte cuenta dónde están las sensaciones. Podríamos empezar por ponerle un color y hasta alguna forma mientras respiramos con presencia.
Es hacer un escaneo del cuerpo para revisar cómo estamos hoy, en este momento. Y este ejercicio ayuda a la aceptación radical, logrando eliminar ansiedades por medio de la respiración.

Por otro lado, la aceptación radical también tiene mucho que ver con nuestros cuerpos. Con vernos al espejo y no poner nuestra atención en lo que NO TENEMOS, en lo que nos falta, en cómo nos gustaría estar, sino observarnos con aceptación.

Esto es sin juicios; y podría leerse como algo imposible, pues el juicio está integrado a nuestro cerebro al ser la forma natural en la que funciona: se compara, emite juicios, se va al pasado y al futuro… pero nuestro objetivo para lograr la aceptación radical sería mantenernos presentes en este momento, respirar, seguir en observación, dejar ir esos pensamientos de juicio, queja y expectativas.

La aceptación radical podría empezar por un ejercicio “sencillo” mientras comemos. Esto sería, estar frente a lo que voy a comer, observarlo y cerrar los ojos para preguntarme con cuál emoción estoy comiendo… dónde siento esa emoción, revisar si tiene alguna forma y/o color y poner mis manos sobre esa parte de mi cuerpo.

Comer con consciencia es darme cuenta de la forma, el sabor, el olor y la textura del alimento. Después puedo revisar mis pensamientos: qué está pasando por mi cabeza mientras como y sobre todo darme cuenta si puedo disfrutar o no lo que estoy comiendo.

Y justo ahí es donde entra la aceptación radical. Seguramente te darás cuenta de todas las creencias que tenemos sobre los alimentos, empezando por catalogarlos como gordos o sanos, como chatarra o saludable. Eso nos genera culpa o no, tristeza o sentimiento de que no tengo suficiente “fuerza de voluntad”. Y muchos pensamientos más que hay que ir eliminando y que se ligan a la no suficiencia, que es lo opuesto a la aceptación radical.

Esta aceptación comienza por entender que NO TENGO POR QUÉ CAMBIARME, ni aceptar esa ideas de lo que es un cuerpo estético, bello y saludable. Esta aceptación viene acompañada de un sentimiento de validación.

Y es que piensa en las personas que amas, por lo menos las cuatro principales, ¿te importa cómo es su cuerpo? Seguramente ni te habías puesto a pensar en eso porque NO ES IMPORTANTE.

La aceptación radical nos lleva a cuestionarnos. Es aceptarnos y tratarnos con respeto, para después empezar a amarnos.

Así que hoy te invito a que revises qué tanto te aceptas, cuál es tu diálogo interno, cómo es tu relación con lo que comes, y a que te des cuenta de todo lo que pasa por tu mente con respecto a ti. Y dime algo, ¿tú crees que vales por cómo te ves?

Envie un mensaje al numero 55-11-40-90-52 por WhatsApp con la palabra SUSCRIBIR para recibir las noticias más importantes.

/CR

Etiquetas


Notas Relacionadas
“Morenacos” al poder Columnas
2024-05-19 - 23:12
Reporte de Infodemia Columnas
2024-05-15 - 22:23
Declinaciones, juego de percepción política Columnas
2024-05-14 - 23:03
El debate poblano Columnas
2024-05-13 - 23:11
+ -