Por Guadalupe Juárez
A pesar de la prohibición de la Secretaría General de Gobierno del municipio de Puebla de prohibir la renta de sillas por parte de particulares, previo al Desfile 5 de Mayo personas apartaron espacios y rentaron hasta por 200 pesos los lugares para disfrutar el desfile.
A través de un comunicado de prensa, la dependencia municipal aseveró que la Dirección de Vía Pública realizaba recorridos para evitar el apartado y la renta de lugares en inmediaciones del bulevar 5 de Mayo.
No obstante, desde las primeras horas del día entre la Clínica 2 y hasta la altura del Hospital de San José, particulares ofrecían a las familias la renta de sillas.
Algunos padres de familia de las escuelas que participan en el Desfile confrontaron a las personas que evitaban que ocuparan los espacios con sus propias sillas, como sugirió el Ayuntamiento.
Los particulares mostraron una actitud hostil y aseguraron que no les "pegaban", como sucedía en otros lugares, ya que ellos se habían levantado más temprano para apartar los espacios que iban a rentar.
Alrededor de las 9:00 horas, las sillas con las que apartaba lugar quienes rentan los espacios permanecía vacías y debido a los recorridos de personal de Vía Pública ofrecían los asientos a 100 pesos.
En la Clínica 2 los particulares que las rentaban fueron retirados por el personal del Ayuntamiento y las familias pudieron ocupar los espacios con sus propios asientos.
En el camellón del Bulevar 5 de Mayo, la mayoría de los asistentes llevaron sus propios bancos y sillas de madera que compraban con los comerciantes que aprovecharon el evento para ofrecerlas.
En cuanto a los comerciantes informales, a pesar de no contar con permisos del Ayuntamiento, se colocaron a lo largo del bulevar para ofrecer todo tipo de platillos, como memelas y tacos.
A diferencia de otros años, los vendedores no requirieron ninguna identificación que avalara que podían comercializar sus productos y desfilaron sin restricciones para ofrecerlos.