Por Guadalupe Juárez
El crecimiento urbano y descargas de redes de alcantarillado municipal a cuerpos de agua, así como de industrias han provocado que las comunidades del corredor Huejotzingo estén expuestas a diversos contaminantes, lo cual significa un riesgo o daño para las personas, así como un desequilibrio ecológico en la zona.
Desde 2017, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) se pronunció al respecto en la recomendación 10/2017 en la que determinó que se violaban los derechos humanos de las personas a no tener un medio ambiente sano, saneamiento del agua y acceso a la información con relación a la contaminación de los ríos Atoyac, Xochiac y sus afluentes.
La recomendación responsabilizaba de ello al gobierno estatal de Puebla y Tlaxcala, así como a diversos municipios, entre ellos Huejotzingo.
En el documento se menciona de manera directa a Santa Ana Xalmimilulco, junta auxiliar de Huejotzingo, al indicar que se detectó la descarga de 30 maquiladoras textiles directamente al río o red de alcantarillado sin previo tratamiento.
Sin embargo, el ayuntamiento de Huejotzingo también ha contribuido a esa contaminación además de su omisión, ya que ha tenido tres procedimientos en su contra por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en 2008, 2015 y 2016 por descargar aguas residuales con parámetros fuera de la norma al río Atoyac.
En octubre del año en curso, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó la construcción del colector pluvial en Huejotzingo de 11 kilómetros de longitud, el cual llegaría a Santa Ana Xalmimilulco.
El proyecto presentado este año por el gobierno de Sergio Salomón Céspedes Peregrina se basó en una serie de diagnósticos hechos desde la emisión de la recomendación de la CNDH con el que busca que la planta tratadora tenga la capacidad de tratar hasta 350 litros por segundo.
Esto permitirá –de acuerdo con el proyecto avalado— que las aguas negras se conviertan en líquido con calidad suficiente para su uso agrícola o para ser desalojadas al río Xonapac y contribuir al saneamiento del Atoyac.
Otro objetivo es que se eviten los olores generados por las descargas de aguas residuales y que ya no ser perciban en las áreas urbanas cercanas y aledañas.
¿Cómo será el proyecto?
El proyecto al que se opuso un grupo de pobladores en Santa Ana Xalmimilulco se llevaría a cabo al margen del Río Atoyac, entre San Martín Texmelucan y la junta auxiliar de Huejotzingo con una inversión de 28 millones 120 mil 113 pesos y una vida útil de 40 años, obra supervisada por la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento del Estado de Puebla (Ceaspue).
El gobierno estatal calculó que la obra impactaría de manera favorable a los municipios de Cuautlancingo, Huejotzingo, San Felipe Teotlalcingo y San Martín Texmelucan.
En el proyecto ejecutivo presentado a la Semarnat, el Ceaspue indica que los impactos negativos para llevar a cabo la obra son mínimos, pues consideran sólo daños como el ruido generado por la maquinaria y la generación de residuos sólidos.
En cambio, afirmaron que sería un beneficio para la población de la zona de manera económica, al necesitar mano de obra de la población.
La planta tratadora también tendría edificios administrativos, de operación y servicios, oficinas, laboratorios, taller de reparación y mantenimiento, cuarto de máquinas, sanitarios para personal, bodegas, acceso de servicios y estacionamiento.
Además, buscaban el mejoramiento de vialidades, alumbrado y diferentes instalaciones que integrarían al sistema de tratamiento.