Migrantes murieron asfixiados y sin agua

El horror: «las personas que vimos estaban calientes al tacto, sufrían de golpes de calor, agotamiento por el calor. No había indicios de agua. Era un camión refrigerado, pero no había evidencia de que una unidad de aire acondicionado funcionando», declaró a los medios el jefe de bomberos de San Antonio, Charles Hood.

No es la primera vez que fallecen tantos migrantes juntos en su intento de llegar a Estados Unidos: en 2017 fueron encontrados 10 en un camión estacionado en un Walmart, también en San Antonio, Texas; y en mayo de 2003, atrapados también en un camión, 19 migrantes murieron… al sureste de San Antonio.

Que no sea la única, no le resta importancia y sí le agrega gravedad: murieron 50 seres humanos víctimas de sus gobiernos y de bandas internacionales de crimen organizado que se enriquecen con el tráfico de personas, porque hay impunidad.

El hallazgo del lunes pasado ocurre en medio de un aumento de los cruces desde México a Estados Unidos, y aunque pareciera que este último país tiene una política de frontera abierta, las condiciones políticas y sociales que se vive lo mismo en Centroamérica que en Venezuela, con pretendidos gobiernos de izquierda, ha orillado a un éxodo masivo.

De nada sirve que el gobierno de Estados Unidos haya obligado a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador a evitar el paso de los migrantes. El Instituto Nacional de Migración ha impedido que al menos 30 mil avancen más allá de la frontera sur, pero los migrantes anunciaron esta semana que el 1 de julio saldrán en caravana hacia el norte de México.

De acuerdo con el informe de estadísticas migratorias dado a conocer el 5 de junio por la Secretaría de Gobernación en el primer trimestre de 2022 el número de extranjeros detenidos por el INM fue de 77 mil 626, 89.3 por ciento más que en el mismo lapso de 2021 cuando la cifra fue de 41 mil 5 personas.

La mayoría de los interceptados son de Guatemala, Honduras, Cuba, Nicaragua, El Salvador, Colombia y Venezuela.

En Estados Unidos el panorama no es mejor: la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza detectó más de 1.7 millones de indocumentados en la frontera con México durante el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre pasado.

Sea por su ubicación geográfica o por las condiciones socioeconómicas, Puebla no está exenta de este fenómeno: esta semana fueron encontrados 69 migrantes en un hotel de San Felipe Hueyotlipan. Se trató de 34 hombres, 28 mujeres y siete menores de edad de Nicaragua, El Salvador y Cuba.

Y el 8 de junio el INM ubicó a 54 migrantes abandonados en la carretera El Seco-Esperanza, aquí en Puebla. Han sido seis meses intensos, en los que el flujo no para.

Mientras no se resuelva la crisis provocada por los gobiernos cuasidictatoriales en países como Guatemala, Nicaragua, Cuba, Honduras, El Salvador, Venezuela, Ecuador, Colombia, seguirán ocurriendo tragedias como la de Texas.

Quizá por eso es tan importante la reunión que el 12 de julio tendrán en Washington los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden, en ella, presumiblemente se abordará el tema migratorio.

Índice de Ciudades Sostenibles 2021 arroja que la zona metropolitana de Puebla no cumple con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 que mide carencia por acceso a la seguridad social, ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo, carencia por acceso a la alimentación, mortalidad materna, mortalidad por infecciones, tasa de suicidios, mortalidad por diabetes y enfermedades hipertensivas, carencia por acceso a los servicios de salud, mujeres que estudian, disponibilidad de agua y equidad laboral, entre otros indicadores. El índice es elaborado por Citibanamex, Laboratorio Nacional de Políticas Públicas del CIDE, el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) y el Centro Mario Molina (CMM).