Puebla
Ayer el ayuntamiento clausuró la planta por un adeudo de 200 mdp, pero el Cabildo decidió levantar los sellos.
Por Guadalupe Juárez
Aunque el gobierno estatal ha actuado como conciliador entre el conflicto entre Cuautinchán, Tepeaca y Tecali de Herrera con Cemex, la empresa se "siente protegida" y no ha tenido disposición para llegar a un acuerdo, señaló el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta.
En conferencia de prensa, después de que se diera a conocer una nueva clausura por parte del Ayuntamiento de Cuautinchán por un adeudo de 200 millones de pesos, el mandatario estatal informó que por la noche el Cabildo decidió levantar los sellos.
No obstante, reconoció que el pago predial de la empresa por establecerse en 900 hectáreas de Cuautinchán y 500 en Tepeaca es injusto, pues a los primeros les da 25 mil pesos al año y a los segundos 15 mil, suma que no corresponde a la extensión de precios utilizado.
Además, de que no pagan uso de suelo, las licencias de construcción y sin corresponsabilidad frente a los municipios, pues se niegan a reparar los caminos dañados donde circulan los camiones con el cemento que trasladan a otros estados.
El gobernador también confirmó que de los 200 trabajadores en Cemex, sólo el 15 por ciento son personas originarias de los municipios donde está asentada, el resto inclusive son de otros estados.
"Hemos intentado llevar una conciliación de los intereses de la planta y de los municipios pero no hemos encontrado disposición de Cemex para resolver absolutamente nada. Se sienten protegidos. No, no, no, en Puebla aplicamos la ley sea cual sea la empresa que se instale o la persona que sea su propietario", advirtió.