La importancia de la rendición de cuentas en las instituciones

La rendición de cuentas es un ejercicio que tiene dos vertientes, por una parte es un derecho que la ciudadanía tiene de conocer, vigilar y evaluar el actuar y el adecuado cumplimiento de funciones de personas, organismos y organizaciones de carácter público, privado y de la sociedad civil, por medio de mecanismos como la transparencia y la fiscalización; y por la otra, es una obligación de las distintas entidades, de informar, dialogar y dar respuesta clara, concreta y eficaz a las peticiones y necesidades de los interesados sobre la gestión realizada, los resultados de sus planes de acción y el respeto, garantía y protección de los derechos.

En ese sentido, ser transparente significa dar información clara, comprensible y simple es hablar claro con los interlocutores, expresar con objetividad, con la finalidad de que la información de la gestión y las prácticas de las instituciones se encuentre al alcance de la ciudadanía interesada.

Por su parte, la fiscalización es el proceso de revisar, auditar y vigilar la relación directa entre los objetivos planteados y las metas alcanzadas en materia de contabilidad, finanzas, presupuesto, avances y beneficios económicos, adecuación programática y endeudamiento en cada uno de los entes de la administración pública para confirmar que se ajusten a los principios de legalidad, definitividad, imparcialidad y confiabilidad.

En los órganos jurisdiccionales electorales, de la mano y de manera muy cercana a los anteriores, otro de los ejes rectores para lograr una efectiva rendición de cuentas es la justicia abierta, la cual es un modelo que busca replantear la relación entre una institución y la ciudadanía con la finalidad de favorecer la transparencia en los servicios, los procesos y la información.

La justicia abierta permite a los tribunales fomentar la transparencia de las acciones que realizan todos los días en favor de las necesidades democráticas y la ciudadanía, por medio de portales que favorecen la compresión de la información.

Así, con esos ejes es que las instituciones deben apegarse a un Estado de Derecho que pueda dar respuesta a las exigencias de las atribuciones que le son conferidas, lo cual resulta indispensable en la vida democrática de un país.

Es por esto, que, en el caso específico de los órganos jurisdiccionales, su actuación apegada a los principios democráticos y conforme a sus atribuciones, es una condición indispensable para su efectivo funcionamiento, ya que son los encargados de resolver conflictos sobre los procesos electivos, que garantizan los derechos políticos de un Estado, y por consiguiente, la rendición de cuentas por medio de los ejes antes mencionados avala que todos los interesados puedan recibir información de manera clara y accesible.

En ese sentido, la rendición de cuentas de los órganos jurisdiccionales electorales, y los actores que intervienen en ella, debe de ajustarse a un modelo que cumpla con su finalidad, es decir, el control de las acciones realizadas en favor de la democracia, informando de manera clara, detallada y precisa, cuáles son las funciones desarrolladas y las acciones que dan cuenta de adecuado funcionamiento.

En consecuencia, resulta pertinente hacer mención que, los informes que realizan las autoridades que representan a los órganos jurisdiccionales, son un ejercicio de rendición de cuentas, ya que en los mismo se detalla de manera precisa las acciones realizadas durante una gestión.

Lo anterior, logra que los interesados conozcan los compromisos adoptados por las instituciones electorales de conformidad con las atribuciones otorgadas, el cumplimiento de sus obligaciones, la debida actuación y el efectivo ejercicio de sus recursos, fomentando el debido ejercicio de rendición de cuentas.

Por ello, es que se concluye que existen diferentes ejes que hacen posible una adecuada rendición de cuentas por parte de las instituciones, lo cual permite que las mismas informen y demuestren que cumplen con las facultades conferidas sin salirse de su marco legal, fomentando la consolidación de las democracias y un adecuado funcionamiento dentro de un Estado de Derecho.