El ascenso del crimen organizado
Por Jaime Carrera
Cárteles del occidente y del noreste del país se disputan la plaza
Durante los último cinco años Puebla se convirtió en un sitio de interés para la delincuencia organizada, pues pasó de ser una plaza sin presencia dominante de algún cartel mexicano a ser disputada por seis asociaciones delictivas: el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), los Caballeros Templarios, la Familia Michoacana, el Cártel de Tamaulipas, Los Zetas y el Cártel del Golfo, según datos del estudio Mexico: Organized Crime and Drug Trafficking Organizations del Servicio de Investigación del Congreso (CRS, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos.
De acuerdo con el compilado de los últimos cinco estudios anuales del CRS de EU., la presencia de cárteles en el territorio poblano fue al alza —con ciertas variaciones— de 2015 a 2019. Mientras hace cinco años el crimen organizado tenía presencia dominante en el norte del país y en entidades vecinas como Veracruz, Guerrero y Morelos, para 2019 en la entidad ya operaban seis organizaciones criminales: una de Jalisco, dos de Michoacán y tres de Tamaulipas, por lo que Puebla quedó en medio de la guerra entre el poderío delictivo del occidente y el noreste.
El estudio Mexico: Organized Crime and Drug Trafficking Organizations 2019 refiere que, en la última década, la circulación de cárteles en México fue constante. En Puebla, de 2015 a 2016, los Zetas, así como pandillas adheridas al Cártel de Golfo y la red Velázquez de esa misma organización dominaban todo el estado.
A su vez, de 2016 a 2017 en Puebla, permanecieron los mismos grupos (Zetas y Cártel del Golfo), además de una pequeña célula delictiva de la organización Beltrán Leyva operante en municipios limítrofes con el estado de Veracruz —pero ya sin presencia en 2018—, mientras que, de 2018 a 2019, ascendieron grupos del Pacífico y fueron a la baja los del Golfo de México.
El estudio CRS refiere que, en los últimos años, las principales organizaciones criminales mexicanas se diversificaron hacia delitos como el contrabando humano y el robo de petróleo, este último rubro reconocido en 2017 por el titular de la entonces Secretaría General de Gobierno, Diódoro Carrasco, quien admitió presencia del crimen organizado a través de grupos locales dedicados al robo de trenes y en carreteras, así como al trasiego de combustible.
A nivel nacional, en 2006, las Organizaciones Mexicanas de Narcotráfico (DTO, por sus siglas en inglés) dominantes fueron: la Organización Tijuana, Arellano Félix (AFO), el Cártel de Sinaloa-Juárez, Vicente Carrillo Fuentes Organización (CFO) y el Cártel del Golfo. De 2018 a la fecha, los cárteles que operan con mayor fuerza son: Cártel de Sinaloa, Los Zetas-Tijuana, AFO-Juárez, CFO-Beltrán Leyva, Golfo, La Familia Michoacana, los Caballeros Templarios y el Cártel Jalisco-Nueva Generación.
Disputas entre cárteles habrían repuntado los homicidios dolosos
En el más reciente estudio del Servicio de Investigación del Congreso de los Estados Unidos, publicado el 20 de diciembre de 2019, se establece la relación del incremento de los homicidios con la división y guerra entre las Organizaciones Mexicanas de Narcotráfico. En ese sentido y en más de doce años, el aumento de las bandas delictivas en México incrementó la inestabilidad entre los grupos delictivos y la violencia.
En Puebla, y a la par del ingreso de los cárteles, el número de homicidios dolosos incrementó 55 por ciento de acuerdo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). En 2015, cuando no había presencia dominante de algún cártel se registraron 493 carpetas de investigación por ese delito, mientras que, para el cierre de 2019, con seis cárteles que se disputaban la plaza, los casos fueron ascendieron a mil 108.
En 2015, los homicidios dolosos registrados por la entonces Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado, ahora Fiscalía General del Estado, fueron 493; para 2016, 581; en 2017, 894; 2018, mil 105; y en 2019, mil 108. En los últimos cinco años en Puebla fueron asesinadas intencionalmente cuatro mil 181 personas. De ese total, más de la mitad, dos mil 668, fueron con arma de fuego, se indica en los archivos históricos del SESNSP.
A nivel nacional, el reacomodo y disputas entre los cárteles de 2015 a 2019 también provocó un alza en los asesinatos dolosos, de acuerdo con el CRS de EU. Es decir, en ese lapso se abrieron 119 mil 809 carpetas de investigación por ese delito: 16 mil 121, en 2015; 20 mil 151, en 2016; 25 mil 036, en 2017; 29 mil 100, en 2018; y 29 mil 401, en 2019. En total, el delito incrementó 45 por ciento en los últimos cinco años.
“La tasa de homicidios intencionales de México alcanzó nuevos récords en 2017 y 2018. En 2019, el Sistema Nacional de Seguridad Pública reportó más de 17 mil homicidios entre enero y junio, estableciendo un nuevo récord. En los últimos meses de 2019, varios fragmentos de cárteles anteriormente cohesivos realizaron actos flagrantes de violencia”, se puntualiza en el documento Mexico: Organized Crime and Drug Trafficking Organizations.
Sin rastro oficial de asesinatos por crimen organizado
En enero de 2020, el presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que el actual Gobierno federal proteja a los cárteles de la droga, así como a integrantes de la delincuencia organizada “tal y como se hacía en administraciones pasadas”. Por el contrario, aseguró que “ya no es como antes” cuando ellos (los cárteles) gobernaban México.
A decir del titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, durante su visita a Puebla, el pasado 4 de octubre, los homicidios vinculados a la delincuencia organizada en la entidad redujeron 65 por ciento al corte de septiembre de 2019, en comparación con el mismo lapso del año inmediato anterior.
“Son pugnas entre células delictivas, hicimos un análisis de la presente administración hasta septiembre (de 2019) en homicidios vinculados a delincuencia organizada, haciendo la comparación con el periodo anterior (septiembre 2018) y teníamos mil 041 homicidios y en la actualidad (septiembre 2019) se tienen 373, es una tendencia a la baja que favorece al estado”, precisó —en su momento— el funcionario.
En tanto, información del Semáforo de Ejecuciones de Lantia Consultores, al cierre de noviembre de 2018 arrojó que Puebla se ubicó en la décimo quinta posición con mayor incremento por asesinatos vinculados al crimen organizado en el país. En total, los 462 incidentes registraron 34 por ciento más que los del mismo periodo, pero de 2017.
“´Se matan entre ellos (integrantes de cárteles)´ dicen muchos. No, las víctimas incluyen estudiantes, amas de casa, policías, alcaldes, candidatos, periodistas, campesinos, comerciantes y a la población en general. Para nosotros, la mayor parte de las ejecuciones son del mercado negro de drogas conforme a lo expresado por diferentes cuerpos policiacos de México", señala el informe Lantia Consultores 2019, con base en cifras de 2018.
De acuerdo con la recopilación de Lantia, el homicidio es el delito más preocupante en México, al registrar una tasa seis veces superior al indicador mundial, por lo que ese esa actividad ilícita continuará subiendo o se mantendrá en altos niveles si las autoridades no empiezan por regular las drogas.