Por Vera Fernández
El hombre ejecutado en la ExHacienda San Bartolo la tarde del domingo era un líder criminal originario de otro estado, por lo que se trató de un ajuste de cuentas entre grupos delictivos.
Así lo confirmó el presidente municipal de Puebla, Pepe Chedraui Budib, quien aseguró que siguen trabajando en fortalecer la estrategia de seguridad con los gobiernos estatal y federal.
En entrevista, refirió que el sujeto en cuestión acudió a una boda que se celebró en el salón de fiestas al sur de la capital, por lo que sujetos armados ingresaron al lugar para ejecutarlo a balazos.
Sin mencionar nombres, aseguró que se trata de una persona que era buscada por todo el país, ya que cargaba con temas pendientes con otros grupos criminales.
“Se están alineando las estrategias y estamos trabajando para que cada vez tengamos mayor paz en Puebla (…) es una persona que venía de fuera a una boda, que era buscada por toda la República y es parte del ajuste de cuentas”, expresó.
El alcalde afirmó que trataron el asunto en la mesa de seguridad de esta mañana con el gobernador, Sergio Salomón Céspedes Peregrina y un subsecretario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) del gobierno federal.
En ese sentido, aseguró que continuarán trabajando de manera coordinada entre los tres niveles de gobierno para garantizar que las familias poblanas tengan paz.
De acuerdo con las versiones que se dieron a conocer, el hombre ejecutado era Jesús Martínez Brito, mejor conocido como “El Marranero”, presunto líder criminal en el estado de Guerrero.
Dicha persona estaría vinculada con el cártel de los Beltrán Leyva y Guerreros Unidos, señalado como responsable de ejecuciones y secuestros en la zona de Iguala.