La CDH Puebla resaltó en su visita la falta de agua caliente, mal estado de las colchonetas y la falta de limpieza en los espacios
Por Guadalupe Juárez
En los últimos cinco años de ser de los mejor evaluados en condiciones a derechos humanos de los reos, el penal de Tepexi de Rodríguez disminuyó su calificación al pasar de 8.30 a 6.2, de acuerdo con datos de la Comisión de Derechos Humanos de Puebla.
En el último Diagnóstico Estatal de Supervisión Penitenciaria de 2021, la CDH Puebla sólo resaltó en su visita la falta de agua caliente para los internos, lo que representa —dijo— en un riesgo de estancia digna para las personas privadas de su libertad.
Pero en el informe anual de actividades del año pasado, precisó que habían registrado tres quejas, una porque a un reo le impedían visitas de sus familiares, otra porque las autoridades penitenciarias tardaron en entregar el cuerpo de una persona que perdió la vida en el penal y una tercera de un interno que denunció al personal penitenciario por malos tratos y vejaciones.
En el diagnóstico de 2020, además de la falta de agua caliente para los presos, destacó el mal estado de las colchonetas y la falta de limpieza en los espacios, pues los visitadores encontraron restos de fauna que podían ocasionar enfermedades. También se encontraron con quejas por la falta de medicamentos.
En 2017, cuando obtuvo la calificación más alta de los últimos cinco años de 8.30, la CDH encontró que había insuficiencia en remisión de quejas de probables violaciones a derechos humanos y problemas de higiene.
En ese entonces palomearon las condiciones de gobernabilidad, pues los visitadores aseguraron que se respetaba el debido proceso en la imposición de las sanciones disciplinarias, había capacitación suficiente al personal penitenciario y había ausencia extorsión y sobornos.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sólo evaluó al penal de mediana seguridad hasta 2019, cuando lo calificó con 8.17.
En esa revisión encontró deficiencias en mantener la salud de los internos, la falta de medicamentos y atención psicológica, y lo reprobó en la falta de acciones para prevenir accidentes violentos.
Indicó que no eran suficientes las acciones de prevención de la tortura o el maltrato, así como la remisión de quejas, pues no tenían acceso a números gratuitos desde teléfonos públicos.
La CNDH lo consideró de los mejor evaluados, pues fue el único con calificación de 8, el Centro de Reinserción Social en Puebla que más se le acercó fue el de Ciudad Serdán con una calificación de 7.13.
Foto: Agencia EsImagen