Claudia Bolaños
La presidenta Claudia Sheinbaum informó que su gobierno avanza en una reestructuración integral de Petróleos Mexicanos (Pemex), con el objetivo de fortalecer sus finanzas y mejorar su funcionamiento operativo.
Durante su conferencia matutina, detalló que la reorganización contempla la simplificación administrativa de la empresa, que pasará de operar como un conjunto de subsidiarias y filiales a funcionar como una sola entidad paraestatal. Con ello, se busca reducir la burocracia y aumentar la eficiencia.
Parte de este proceso incluye la liquidación de personal de confianza, garantizando el respeto a sus derechos laborales.
En cuanto a la situación financiera, Sheinbaum anunció que a partir de julio comenzará la regularización de pagos a proveedores. Indicó que ya se autorizó un primer monto por 147 mil millones de pesos, que será destinado prioritariamente a pequeñas y medianas empresas.
La decisión responde a las exigencias de compañías contratistas del sector energético, que han alertado sobre la acumulación de adeudos y sus efectos en las operaciones.
La presidenta sostuvo que su administración busca que Pemex sea una empresa pública eficiente, con una mejor gestión y al servicio del país.