Policía asesinado en Chignahuapan tenía una orden de aprehensión

Uno de los policías municipales asesinados en Chignahuapan tenía una orden de aprehensión por homicidio calificado, reveló el gobernador Miguel Barbosa Huerta al asegurar que se reforzó la seguridad en dicho municipio y que pronto se disolverá a la banda criminal responsable del ataque a los elementos.

El jefe del Ejecutivo estatal señaló que es responsabilidad del ayuntamiento encabezado por Lorenzo Rivera Nava haber contratado a Juan Carlos N., director de operaciones de la Policía Municipal de Chignahuapan, quien —según medios locales— en 2018 habría asesinado a un albañil.

Sin embargo, dijo que las autoridades estatales actuaron “rápido” y ya están identificados los delincuentes que atentaron en contra de los elementos municipales de Chignahuapan, ataque en el que perdieron la vida Juan Carlos N. y Claudia Herrera, mientras que otros dos uniformados resultaron heridos y ya se encuentran fuera de peligro.

Aseguró que pronto se girarán órdenes de aprehensión contra los responsables, al tiempo admitió que en Chignahuapan es un lugar complicado desde hace tiempo y que todavía hay asientos de grupos dedicados al robo de combustible.

“Pronto habrá mandamientos legales para poder localizarlos y detenerlos, ese asunto está aclarado, se tiene información completa de todos los que participaron ahí, la indagatoria que se abrió a partir de los hechos del viernes tenía antecedentes y ya se acumularon”, asentó.

Barbosa Huerta dio a conocer que también se identificó a quienes dispararon en contra de personas que se encontraban en un depósito de cerveza en Zacatlán, provocando la muerte de dos hombres de 21 años.

El mandatario calificó el ataque como “estúpido y loco”, pero dijo que es necesario saber por qué se cometió, así como la forma en que funcionaba el establecimiento.

En ese sentido, indicó que éste tipo de negocios también deben ser regularizados, pues según los primeros reportes el ataque armado —que dejó un saldo de 11 heridos y dos muertos— se registró la madrugada del 4 de noviembre, además se refirió que la mayoría de las víctimas son estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de la Sierra Norte de Puebla (ITSSNP).