Tiraditos

Puebla miércoles 04 de marzo de 2020 - 04:58

MORENOVALLISTA EXTRAVIADO

•Jorge Aguilar Chedraui cree, fervientemente, que tiene vida política después del morenovallismo. Tan lo cree que desde hace varias semanas anda muy emocionado organizando cenas con amigos suyos, algunos de ellos empresarios consentidos en su paso por la Secretaría de Salud estatal.

Lo sorprendente del caso, dicen algunos que participaron en la reuniones, es que Aguilar Chedraui no está pasando la charola para financiar su campaña a la alcaldía de Puebla. La duda realmente mata: ¿Será que el ex diputado local se gastará sus cuantiosos ahorros amasados al amparo del poder?

¿QUIÉN AUTORIZÓ?

•Vaya escándalo el que detonó la organización Impunidad Cero, al comprobar que entre 2014 y 2019 fueron desviados más de 124 millones de pesos de la Secretaría de Salud estatal. Esos recursos fueron sustraídos mediante el uso de facturas falsas, emitidas por empresas fantasma. El estudio no establece con precisión cuántas empresas y facturas fueron utilizadas para este fraude, por lo que la sospecha recae en tres ex secretarios en esa dependencia: Salvador Escobedo Zoletto, Arely Sánchez Negrete y Lucía Ojeda Lara. La segunda es la única sobre quien existe claridad que a su paso se contrató a la empresa fantasma Blinckham SC.

ASPIRACIONES FALLIDAS

•Ahora que se dio a conocer la lista de los aspirantes a consejeros del Instituto Nacional Electoral saltan a la vista dos nombres: Juan Pablo Mirón Thomé y Claudia Barbosa Rodríguez. Ambos enfrentan procesos de destitución ante los tribunales, promovidos por Morena por avalar el triunfo de Martha Erika Alonso Hidalgo. La segunda es pariente lejana del titular del Ejecutivo estatal pero eso no significa que tenga algún respaldo. Mientras que el primero fue uno de los funcionarios hechos al vapor por el morenovallismo a falta de cuadros.

CONTRAPESOS EN EL PT

•Aunque algunos líderes del Partido del Trabajo en Puebla han decidido replegarse ante la 4T nacional y local, no se debe perder de vista que su contrapeso al interior del instituto político tiene nombre y apellido: Lizeth Sánchez García. La actual secretaria del Bienestar estatal fue la ex dirigente que dio muy buenos resultados en la elección del año pasado y fue la responsable de aglutinar a un amplio número de operadores que estaban desperdigados en el interior del estado. Aunque la secretaria se encuentra metida de lleno es su función pública, cuando sea necesario meterá mano para poner orden en la casa.