Puebla
Las autoridades sanitarias reconocen que la población enfrenta el síndrome de “fatiga compasiva” ante el confinamiento por Covid-19.
Por Jaime Carrera
El confinamiento, las medidas restrictivas y la crisis sanitaria a causa de la pandemia de Covid-19 han provocado hartazgo y apatía que se han visto reflejados en la relajación social de medidas preventivas de contagios por parte de la población, situación que a nivel mundial se conoce como “fatiga compasiva”, alertaron autoridades estatales.
Ante ello, y en medio de la irresponsabilidad social que ha impedido contener los nuevos contagios de Covid-19, Puebla se mantendrá en Semáforo Rojo del sistema de monitoreo estatal y el decreto de restricciones en la operación de sectores productivos no esenciales se prorrogó por 15 días más, es decir, hasta el próximo 8 de marzo.
A la par, avanza el plan nacional devacunación contra el coronavirus, este martes arribarán a la entidad 24 mil 500 dosis del biótico de Pfizer, a distribuirse para la segunda dosis del personal de primera y segunda línea de batalla contra la pandemia, así como a un grupo de poco más de 10 mil adultos mayores en el territorio poblano.
A fin de consolidar una estabilidad a la baja de contagios y hospitalizaciones, el gobernador Miguel Barbosa Huerta pidió a los poblanos reflexionar y entender que la reapertura económica se realiza para dar un respiro a las empresas y no para abarrotar los espacios.
“(La fatiga compasiva) es una auto justificación de las personas a no hacer caso, porque ya se les agotó su paciencia, pero no, los llamo a un esfuerzo máximo y que seamos ejemplo frente al país de cómo podemos resolverlo, la vacuna no lo resolverá de manera inmediata”, concluyó.