Poblanos fallecidos por el virus en EU, aún sin ser repatriados

Según el cónsul de México en Nueva York, el lunes comenzó el traslado de los restos; sólo 168 mexicanos han sido identificados por la SRE.

Por Mario Galeana

Sólo 168 de los 310 registros de muertes de poblanos en Estados Unidos a causa de Covid-19 han sido plenamente identificados por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Del resto se desconoce su nombre, o sencillamente sus familiares no autorizaron dar a conocer esta información, de acuerdo con el gobernador Miguel Barbosa Huerta.

En conferencia de prensa, el mandatario explicó que hasta el momento no se han repatriado los restos de ningún poblano fallecido en aquel país a causa de la pandemia, debido a la saturación de los servicios legales que ofrecen los consulados de México en Estados Unidos.

“Cuando haya posibilidades legales, lo que cueste vamos nosotros a ponerlo. El plan era con el Consulado de México en Nueva York, de 60 mil dólares, nos proponía el cónsul que 20 mil nosotros, 20 mil el consulado y 20 mil los interesados. Bueno, si ninguna de las otras dos partes quiere aportar, lo hacemos nosotros de manera completa”, anunció.

Mientras tanto, el cónsul de México en Nueva York, Jorge Islas López, anunció que a partir de este 22 de junio inició un programa para repatriar en un primer viaje los restos de 500 mexicanos fallecidos.

En una entrevista cedida ayer a Ultra Noticias, el cónsul informó que los restos de los fallecidos que hayan sido cremados serán entregados en una caja sellada en la que se establecerá el nombre de la víctima, así como los datos de contacto de la persona que recibirá la urna.

“Estamos pensando que en este primer traslado se envíen 500 cajas con restos de cenizas y haremos otra segunda vuelta para otras 500 cajas, si fuera el caso o si, lamentablemente, fuera necesario”, abundó.

En días previos, el cónsul había reconocido que algunos trámites de repatriación podrían tardar meses, debido a que las muertes de mexicanos en Estados Unidos habían crecido exponencialmente.

“En los días pico tuvimos 700 u 800 muertes diarias. Hoy estamos en números de menos de 40 personas.

La red hospitalaria colapsó, junto con las morgues y las agencias funerarias.

Y se retrasó también la expedición de documentos que son fundamentales para que podamos dar el visado de los seres queridos”, abundó.