Puebla
Escala conflicto entre el rector y el gobernador: el mandatario estatal afirma tener pruebas de los negocios que se han hecho en la universidad y la casa de estudios amaga con movilizaciones estudiantiles.
Por Jaime Carrera
La relación que durante décadas mantuvieron gobiernos estatales con la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) se ha esfumado. Hoy el punto de quiebre se da en medio de una diferencia en la explicación del término “autonomía” y la acumulación de señalamientos por el presunto quebranto a las finanzas universitarias.
El gobernador Miguel Barbosa Huerta ha sido claro y contundente: “No permitiremos daños a la BUAP”, luego de que el rector Alfonso Esparza Ortiz, cobijado por alumnos y profesores integrantes del Consejo Universitario, acusó nuevamente una persecución política.
“Las pruebas ahí están”, las pruebas de “estafas maestras”, reviró el jefe del Ejecutivo estatal.
El cruce de acusaciones no quedó ahí. Este fin de semana, Esparza Ortiz salió en defensa del diputado local José Juan Espinosa Torres.
“Somos más de uno los perseguidos políticos en el estado, @JoseJuanEsp, crítico constante de este gobierno, tiene ya orden de aprehensión”, decía un tuit que más tarde fue borrado de la cuenta del rector en Twitter.
El vínculo entre ambos personajes, de acuerdo con información del portal MTP Noticias, data de la gestión de Espinosa como alcalde de San Pedro Cholula: Una presunta complicidad para el desvío de al menos 6.2 millones de pesos que se habría consumado entre 2014 y 2018 con facturas que la BUAP habría emitido al gobierno sampetrino.
En un vaivén de declaraciones, Esparza Ortiz ha pedido frenar los “embates y mentiras” de las que ha sido objeto durante los últimos meses y sostuvo que no se dejará amedrentar por las amenazas y presiones ajenas la universidad pública, sin embargo, la ruta del dinero manejado en la BUAP sigue siendo investigada por instancias como la ASE.
En repetidas ocasiones, Barbosa Huerta ha negado que exista una persecución u hostigamiento hacia alguna persona, aunque enfatizó que su administración cree en la ley y, por consecuencia, su compromiso es respetarla y hacerla cumplir, sobre todo, para combatir la corrupción y que los delincuentes “de cuello blanco” no sigan saqueando a Puebla.
“Quienes hicieron de la universidad un lugar en donde se creaban círculos de beneficio, sí, así ha sido ¿Cuál es la relación que han tenido los gobernadores con los rectores?
Negocios, beneficios, estafas maestras, tengo pruebas ¿Eh? Tengo pruebas y esa es una realidad que todos conocen”, asintió recientemente el gobernador Barbosa.
Las diligencias de la Auditoría Superior del Estado que derivaron en una demanda contra el rector Esparza por los delitos de presuntas operaciones simuladas por 264 millones de pesos siguen su curso. En tanto, y en respuesta, los amagues de una mega movilización estudiantil en defensa de la “autonomía” por parte de directivos universitarios, apenas comienzan.