Tiraditos

Puebla viernes 05 de junio de 2020 - 08:14

LA MANO DE ARDELIO

•Ardelio Vargas Fosado, asesor en materia de seguridad del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, demostró el oficio que le ha dejado años de experiencia en el servicio público, al lograr que el grupo de policías estatales que mantenían un paro de labores aceptaran un incremento salarial de 20 por ciento. La estrategia fue brillante en todos sentidos. Primero, aprovecharon que los disidentes se negaron a entablar una mesa de negociación el mismo martes que inició la protesta y las autoridades se fueron a negociar directo con la base policial de la

SSP estatal un aumento de 14 por ciento. Al verse sorprendidos, los inconformes decidieron continuar el paro, pero no contaban con que Ardelio Vargas entraría en escena y los encapsularía a una plática directa, eso llevó a todos a una nueva mesa de negociación bajo el entendido de que había una petición de incremento del 20 por ciento. Sabedor que la nueva petición estaba dentro del margen de maniobra, no hubo problema en destrabar el asunto. Luego, vino atender las quejas de maltrato y demás. Nuevo triunfo: el Jefe del Estado Mayor de la SSP será temporalmente el encargado de Dirección de Operaciones Policiacas. No habrá destitución de funcionarios, sólo un impasse para calmar los ánimos. Conclusión: todos ganaron y el gobierno del estado hizo sus aliados a sus otrora opositores.

PATÁN CONTUMAZ

•Héctor Alonso Granados representa lo peor que puede reunir un político: ignorante, bravucón, patán, déspota, homófobo, misógino, acomodaticio, chapulín y millonario gracias a ser yerno del líder charro Blas Chumacero. Aunque el diputado local, que renunció a Morena para incorporarse a Movimiento Ciudadano, ya se había tranquilizado y dejó de lado su actitud de porro legislativo, el gusto no duró mucho y regresó a las andadas. En una sesión virtual ordinaria del Congreso local, Alonso Granados le gritó: “cállate tú” a su compañera Nora Escamilla. El tono grosero provocó el rechazo del resto de los legisladores, pero el diputado siguió con el ataque al decir: “Ya estuvo bueno con esta niñita” e intentó justificar su exabrupto al decir que no lo dejaba hablar. A Héctor Alonso no le falta un curso de sensibilidad sino una licenciatura, maestría y doctorado de nuevas masculinidades.

AMENAZA REAL

•Desde que el gobierno federal anunció la Nueva Normalidad los casos de Covid-19 se dispararon. Los ciudadanos entendieron que todo había acabado, pero estamos en el punto más alto de la pandemia. En Puebla, los hospitales tienen entre 30 y 40 por ciento de capacidad para atender y pueden colapsar. Mientras a nivel federal el rockstar Hugo López-Gatell por la mañana dice una cosa y por la tarde otra, en la entidad hay focos rojos. Ya lo dijo el gobernador Luis Miguel Barbosa: No quiero ser alarmista, pero la situación es muy preocupante.