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Con la noticia de que Robert Prevost ha sido elegido como el nuevo papa, bajo el nombre de León XIV, también surgen comparaciones con su antecesor en el cargo, el Papa Francisco I. Pues vale la pena mencionar que mientras el argentino era recordado por su devoción al fútbol y al club San Lorenzo; este no será el caso de León XIV, ya que él tiende más hacia el tenis.
Robert Prevost nació en Estados Unidos y posee nacionalidad peruana, manteniendo una relación especial con el país andino, ya que ahí hizo labores como misionero y obispo de Chiclayo. Por internet se rumoraba que pudiese ser aficionado al club de la primera división peruana Alianza Lima, no obstante, no hay evidencia de que esto sea cierto.
Por otro lado, en una entrevista que concedió a la página web augustinianorder.org, este se declaró seguidor y practicante del tenis, afirmando que aunque le gustaría retomar este deporte, no podría jugarlo debido a que estaba muy ocupado. Y ahora como nuevo Sumo Pontífice, es obvio que tendrá menos tiempo de hacerlo.
"Me considero un tenista aficionado. Desde que salí de Perú he tenido pocas ocasiones de practicarlo, así que tengo muchas ganas de volver a la pista", respondió el susodicho al ser cuestionado sobre sus pasatiempos favoritos.
Algo curioso es que su nombramiento como máxima autoridad de la iglesia católica coincidió con el Masters 1000 de Roma en el Foro Itálico, el cual estaba a 5 km del vaticano, saliendo el humo blanco durante el juego entre Fogini y Fearley.