AFP
Al menos cinco personas quedaron heridas por el estallido de un coche bomba contra una estación policial este viernes en el suroeste de Colombia, el segundo en tres días atribuido a las disidencias de las FARC que negocian la paz con el gobierno.
La explosión se registró en el municipio de Jamundí, en el departamento del Valle del Cauca, donde los rebeldes se enfrentan contra la fuerza pública como represalia por su ofensiva militar para golpear el narcotráfico, según el presidente Gustavo Petro.
"Repudiable atentado en Jamundí, Valle. Seguimos afectando las economías ilegales y la reacción son hechos de violencia. No cederemos. La Fuerza Pública debe copar militarmente el territorio y como gobierno llegaremos de manera integral a estas poblaciones", aseguró el mandatario en la red social X, antes Twitter.
Videos difundidos en redes sociales muestran una gran humarada y personas corriendo mientras suenan alarmas minutos después de la explosión.
De acuerdo a la policía, los cinco lesionados son civiles, uno de ellos "en condición de gravedad".
"Asimismo, se registran daños en 5 residencias y en la fachada de la subestación de policía", añadió la institución en un mensaje a medios.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, señaló como responsables del atentado a las disidencias del Estado Mayor Central (EMC), el brazo más poderoso de los rebeldes que rechazaron el acuerdo de paz en 2016 y que avanzan hacia una nueva mesa de negociaciones con el gobierno que se instalará el 8 de octubre. Ese día comenzará también un cese al fuego.