Más de 20 millones disponibles para trabajar, pero sin empleo: Banxico

Es notorio el incremento en el número de trabajadores subempleados, así como en la población no económicamente activa pero disponible para trabajar como consecuencia de la pandemia Covid-19 en el país, señaló la Junta de Gobierno del Banxico.

En su minuta mensual, el órgano de gobierno del Banco de México (Banxico) la mayoría destacó la significativa reducción en las cifras de empleo; con información del Inegi la pérdida de empleos llegó a 12.5 millones en abril. Se subrayó que el número de trabajadores ya sea desocupados, disponibles para trabajar o subempleados, aumentó en más de 20 millones entre marzo y abril.

Un miembro de la Junta puntualizó que de estos, más de 10 millones corresponden al sector informal y que la mayoría de los empleos perdidos eran de ingresos de dos salarios mínimos o menos, lo que evidencia que la población más vulnerable se ha visto particularmente afectada.

Los asistentes a la Junta de Gobierno fueron Alejandro Díaz de León Carrillo, gobernador del Banxico; Irene Espinosa Castellano, Gerardo Esquivel Hernández, Javier Eduardo Guzmán Calafell y Jonathan Ernest Heath Constable, subgobernadores; Arturo Herrera Gutiérrez, secretario de Hacienda; Gabriel Yorio González, subsecretario de Hacienda, y Elías Villanueva Ochoa, secretario de la Junta de Gobierno del Banxico.

Algunos de los asistentes, subrayaron que en los primeros cinco meses del año se perdieron cerca de un millón de puestos de trabajo registrados en el IMSS. Uno agregó que los retiros por desempleo de las cuentas individuales de las Afores alcanzaron su máximo histórico. La mayoría afirmó que si bien la reapertura de algunos sectores y regiones en mayo y junio propiciará cierta recuperación económica, la afectación ha sido considerable y persiste incertidumbre.

Hubo quien puntualizó que si se contempla a aquellos considerados como “disponibles” para trabajar como parte de la población económicamente activa, la tasa de desempleo “encubierto” sería de 25.4 por ciento de la fuerza laboral. Y al incluir también a los trabajadores subempleados, se llegaría a un valor de 50.6 por ciento para el indicador conocido como brecha laboral.

Un miembro de la junta indicó que “la entrada en vigor del T-MEC y la recuperación anticipada de la economía estadunidense deberían apoyar a la inversión, pero que esto difícilmente será suficiente para llevarla a los niveles que se requieren, en virtud de la percepción del sector empresarial de un deterioro importante del ambiente para los negocios”.

La Junta de Gobierno coincidió en que el balance de riesgos para el crecimiento se mantiene significativamente sesgado a la baja. Destacaron el riesgo de un nuevo brote del Covid-19. Uno alertó que ello podría ocasionar problemas financieros y de solvencia.

La mayoría notó que “los riesgos persisten y que las salidas de capital han continuado, aunque a un menor ritmo con

respecto a lo observado hace unas semanas. Algunos puntualizaron que los datos acumulados indican salidas superiores a 13 mil millones de dólares en renta fija”.

En cuanto a los riesgos para los mercados financieros nacionales, algunos destacaron los desafíos que persisten sobre la situación de Pemex y las finanzas públicas, así como el debilitamiento institucional. En lo externo, uno mencionó que destacan los riesgos derivados de la pandemia, de la relación entre Estados Unidos, China y otros países, y de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

La mayoría de sus miembros destacó que hay proyecciones de una contracción de hasta dos dígitos en 2020. Solo en abril, la actividad económica del país se hundió 17.3 por ciento frente al mes previo, una cifra récord desde que hay registros, debido sobre todo a los efectos del confinamiento sanitario.

Banxico recortó el mes pasado por novena ocasión consecutiva la tasa clave de interés a 5 por ciento, su nivel más bajo desde septiembre de 2016.

Otro miembro destacó la continua preocupación del sector empresarial por el Estado de derecho, la inseguridad, el deterioro del marco institucional y la orientación de algunas políticas públicas, entre otros aspectos.

La mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banxico afirmó que si bien la reapertura de algunos sectores y regiones en mayo y junio propiciará cierta recuperación económica, la afectación ha sido considerable y persiste incertidumbre, y agregó que los indicadores de pedidos manufactureros y de confianza empresarial y de los consumidores se encuentran en niveles bajos.