Frena Sierra Norte explotación minera

La comunidad indígena maseual entregó al juzgado quinto de Distrito de Puebla el acta de una asamblea celebrada en junio pasado para informarle que los pobladores de la Sierra Norte, que ganaron un amparo en marzo contra tres concesiones mineras, rechazaron hacer una consulta, ya que determinaron en una asamblea previa negar cualquier permiso que explote sus tierras.

En conferencia de prensa, explicaron que el 26 de junio en la comunidad de Zacatipan, Cuetzalan, los pobladores determinaron no dar su consentimiento para la realización de actividades mineras, por lo cual exigieron a las autoridades a no insistir con el tema.

“Ha sido un proceso largo, y contrario a eso, de mucho aprendizaje, que ha sido siete años desde que se mete la demanda de amparo. Nosotros pedimos respeto y exigimos respeto porque lo merecemos y tenemos derecho a determinar en qué queremos ocupar nuestro suelo”, dijo Leticia Vázquez, representante del pueblo masewal.

Javier Martínez del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) explicó que a raíz de que un juzgado federal determinara cancelar los permisos que le permitían extraer oro y cobre a cielo abierto al Grupo Ferrominero en los municipios de Tlatlauquitepec, Yaonáhuac y Cuetzalan, el proceso legal se encuentra en la fase de reparación del daño por haber otorgado los permisos sin una consulta previa.

Consideró que es innecesario abrir la discusión a una consulta, cuando la población ya ha rechazado la actividad minera en la zona, además de que estos mecanismos están validados en la Constitución mexicana.

“Estamos en juicio en ejecución de sentencia, ya no se discute si se habían violentado o no los derechos, ya se confirmó legalmente que se transgredió los derechos, y está obligado a reparar y es donde estamos parados”, señaló.

Daniel Siqueira, de la Fundación del Debido Proceso indicó que, conforme a estándares internacionales, si un juzgado federal ya determinó que se vulneró los derechos de los pueblos indígenas al otorgar permisos a minerías sin su consentimiento, las consultas ya no tendrían que hacerse, ante el rechazo de esta actividad.