Nos dicen que vinimos a esta vida a “ser felices”… de pronto me despierto y me doy cuenta de lo frustrada y enojada que vivo porque no soy “feliz”. No esa felicidad que el sistema nos ha vendido… no me hace feliz ser exitosa en el contexto que nos han impuesto.
No tengo un negocio productivo… supongo que no es mi prioridad montar algo de acuerdo a los ingredientes que me dicta el sistema para “triunfar”.
Tampoco soy una mamá modelo. No educo a mis hijos con toda la paciencia y amor y entendimiento con el que también nos dicen que hay que llevar a cabo.
No tengo una “familia” con los integrantes deseados. No tengo pareja, no tengo muchos amigos ni eventos sociales.
Así que si me dejara llevar por los estandartes sociales, no tengo nada de lo que esta cultura me dice que debería de contruir y trabajar para, por fin, alcanzar “mi felicidad”.
Entonces, me doy cuenta de que “sufro”, porque el sufrimiento viene del miedo y del deseo. Y sí, en ocasiones tengo miedo al darme cuenta de que no he logrado nada de lo anterior.
Definitivamente mi perfil de Instragram no es el más envidiado… no clasifica para la foto “perfecta” de nada. Y a veces me da inseguridad no caber en todas estas etiquetas… así que sufro porque “no soy feliz”. Mi mente me cuenta unas historias de terror y drama que ya las quisieran los más crudos escritores.
Y es que nos dicen que vinimos a esta vida a ser felices y cuando toco el enojo, el miedo, la envidia… me siento mal conmigo misma por sentir, porque esta sociedad sólo permite tener emociones que no incomoden al de junto.
Entonces me doy cuenta de que “sufro”, porque mi mente me dice que quiere algo diferente, tiene otras expectativas; desea sentir, vivir y tener otras cosas.
Así que concluyo que NO vinimos a ser felices, sino a trabajar con nuestro sufrimiento, es decir con nuestros miedos que nos llevan a resistirnos ante las situaciones que la vida nos presenta y que no sorteamos de acuerdo a este sistema.
Y sí, tengo miedo de no lograr ser productiva laboralmente, tengo miedo de no ser la mejor madre, de que mis hijos se descarrilen, que fumen, tomen y se desvelen. Tengo miedo de no encontrar una pareja que me “complemente”, de no tener quien “me proteja” y de morirme “sola”… porque socialmente estamos en esta vida para interpretar un papel dentro de un sistema familiar.
Así que sufro porque no soy feliz… en estos contextos, con estas creencias… así que no creo que vine a ser feliz de acuerdo a la felicidad establecida por todo el sistema.
O quizás estas letras nada más son dictadas por una mente en sufrimiento… pero, ¿tú qué crees? ¿Crees que vinimos a ser felices? Y dime algo, ¿sufres por no alcanzar esa felicidad? ¿O tu concepto de felicidad es otro?