Cierre de 5 de mayo provoca ira de comerciantes

Por Iván Rivera

El Ayuntamiento de Puebla una vez más falló en sus estrategias para controlar el ambulantaje en el Centro Histórico, pues el cierre de la calle 5 de Mayo, entre la 4 y 8 oriente-poniente, para evitar la colocación de puestos, únicamente provocó el enfado del comercio establecido, que se inconformó por las afectaciones a sus ventas con el cierre de estas calles.

Los comerciantes formales, principalmente de productos como ropa y calzado, reprocharon al personal de Vía Pública de la Secretaría de Gobernación por esta medida que consideraron sin sustento pues en otros sitios como la CAPU o la calle 3 Norte prolifera el comercio informal.

Después de un par de horas de discusión, la Segom cedió a las presiones de los comerciantes y el personal retiró las vallas que estaban instaladas, aunque los vendedores ambulantes de calles como la 8, 10 y 12 Oriente-Poniente siguen ejerciendo comercio de productos como alimentos, juguetes, ropa y cosméticos, entre otros.

El Ayuntamiento de Puebla no ha podido contener el ambulantaje en el primer cuadro de la ciudad y durante este fin de semana, integrantes de la agrupación 11 de Marzo liderada por Martín Juárez, invadieron la plancha del Zócalo con carritos con venta de nieves y frituras.

A decir de los vendedores, el titular de la Segom, René Sánchez Galindo permitió la colocación 15 puestos hasta el 11 de diciembre y luego del operativo de Vía Pública, mostraron pancartas para exigir a la presidenta municipal Claudia Rivera, su autorización para vender durante la temporada decembrina.